Pese a que esté siendo un curso muy duro, habéis demostrado estar a la altura. Tres meses confinados mientras 50.000 de los nuestros se nos iban y entretanto, con la mejor actitud devorasteis el programa teórico y preparasteis cada tratamiento para volver en junio y doblar horas de clínica hasta ayer, 31 de julio, que colgasteis vuestras batas.
Descansad estas cuatro semanas que bien merecido lo tenéis y llenaros de fuerzas para seguir dando la batalla este otoño.
Tenemos la certeza de que alcanzaréis vuestros objetivos y aunque se retrase un mes la finalización de este curso, en esta Escuela no se quedará sin impartir una sóla hora del programa. Ese ha sido y será nuestro compromiso.